¿El aceite de pescado puede reducir el ojo seco?
Nuestros ojos necesitan una capa saludable de lágrimas. Sin esta lubricación, nuestros ojos se enrojecen, pican y se irritan. Esto puede provocar una afección llamada ojo seco.
El ojo seco se vuelve más común con la edad. Algunas mujeres desarrollan ojo seco durante la menopausia, debido a los cambios hormonales. Otras personas desarrollan ojo seco por vivir en un ambiente seco y con viento, o por trabajar en un edificio con aire acondicionado constante. La exposición al sol, al humo del tabaco o a medicamentos para el resfriado o las alergias, también puede provocar sequedad ocular.
¿Pueden los suplementos de aceite de pescado tratar el ojo seco?
Si bien las lágrimas artificiales y las pomadas son los tratamientos más comunes para el ojo seco, algunos pacientes han escuchado el consejo obsoleto de que los ácidos grasos omega-3 también pueden ayudar. Desafortunadamente, no hay pruebas sólidas de que esto sea cierto.
Los omega-3 están disponibles en forma de cápsulas como suplementos de aceite de pescado. Anteriormente se pensaba que los suplementos de aceite de pescado podrían ayudar a aliviar el ojo seco. Pero un estudio del año 2018 con más de 500 personas, encontró que las cápsulas que contenían suplementos de aceite de pescado no mejoraban los síntomas del ojo seco. Los suplementos de aceite de pescado no están estandarizados — las diferentes marcas varían en contenido y calidad — por lo que puede resultar difícil sacar conclusiones sobre sus beneficios. Sin embargo, en general, los suplementos de aceite de pescado no parecen beneficiar a los pacientes con ojo seco.
¿Una dieta rica en ácidos grasos omega 3 beneficiará a los ojos?
Los omega-3 se pueden consumir de forma natural comiendo salmón, sardinas, arenque, atún, lacha o hígado de bacalao. No está claro si las fuentes dietéticas de grasas omega-3 son beneficiosas para el ojo seco u otras afecciones oculares.
Una encuesta encontró que las mujeres que reportaron consumir la mayor cantidad de grasas omega-3 provenientes del pescado, tenían un riesgo menor de padecer ojo seco, en comparación con las mujeres que comían poco o ningún marisco. Pero debido a que la encuesta se basó en información proporcionada por los propios participantes, puede ser poco confiable, la relación entre la dieta y el ojo seco, sigue siendo incierta.
Pregúntele a su oftalmólogo sobre las opciones de tratamiento para el ojo seco, según su ojo y su salud general. Una dieta rica en estos ácidos grasos puede ser beneficiosa por otros motivos de salud.